DOLOR
Siempre supe que tenía tolerancia al dolor,
lo supe cuando siendo niña me quebré
y no fui al medico sino dos días después.
Lo valore cuando nacieron mis hijos,
y en el parto pensé eso es todo
tan poco dolió.
Pero descubrí que no estoy inmunizada
al dolor del alma,
en eso soy débil.
Una simple palabra abre una herida que sangra
y nunca cicatriza torturándome mientras se agranda.
Una ironía es un golpe
que deja moretones en esos lugares donde los oculta
la sonrisa falsa.
¿Por qué mi cuerpo esta preparado para soportar
aquello que mi alma no puede tolerar?.
Hoy estoy triste,
pero no pienso en la muerte,
ella me acompaña, me espía de cerca,
pero incluso ante ella soy fuerte,
no me rindo fácil,
no me me muestro débil.
Aunque en el fondo sepa
que la herida sangra,
que el moretón molesta
y que detrás de esto, esta ella.
bueno.. parece que tuvimos un día triste hoy y la verdad es que es cierto tenés mucha tolerancia al dolor físico y creo que la tolerancia al dolor del alma la fuiste perdiendo.
ResponderEliminarVerónica de santa fe