Hoy estuve reflexionando sobre la relación con mis padres, desde muy pequeña fui obediente y aunque mi naturaleza es ser rebelde, aceptaba las normas de mi casa aunque con quejas de por medio.
En mi adolescencia, también aceptaba que no me dejaran ir a bailar o reunirme con mis amigos, hasta que después de casarme algo hizo un clic en mi persona y cuando fui madre, esos padres perfectos dejaron de ser tan perfectos fue un proceso lento que pasa por ver a los padres como seres que cometen errores, después pasan a ser culpables de todo lo malo de nuestra vida, pero hoy hice un descubrimiento, ya no estaba enojada.
Algo cambio en mí, no estoy enojada y no los culpo de nada, entiendo que hicieron lo que pudieron con mi educación y en muchas cosas fue muy bueno, pero hoy siento que debo seguir adelante, con mi vida y dejar atrás los rencores con mis viejos es parte de eso.
Se que esto va ayudarme a mejorar cosas de mi vida, aunque no creo que dejen de molestarme los comentarios de mi mamá sobre mi vida, espero algún día reírme de sus comentarios, y seguir adelante, como hoy hago con el hecho de los errores que cometieron, yo soy más fuerte de lo que parezco y esto es un gran avance en mí, aunque algunos no lo entiendan, evolucionar personalmente, psicológicamente es parte del proceso de crecimiento que nos transforma en seres mejores.
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