Hoy fue uno de esos días donde a mi hijo mayor se le ocurrió hacer esas preguntas aparentemente inocentes y sin ninguna intención de hacernos daño, pero nos dejan en la cama pensando o angustiadas filosofando o pensando nuestra forma de vida.
Crié a mis hijos con libertad de hablar, preguntar y dándole todas las explicaciones que requieren, desde porque crecen las plantas hasta porque la muerte se lleva a las personas o donde va la gente cuando muere. Pero a veces esa capacidad de preguntar se nos vuelve en contra y nos quedamos sin respuestas, como contestar a una pregunta como ¿por que papá y vos no son separados?, a lo que después de quedar muda uno pregunta ¿ por qué querés que nos separemos? , .....porque así haría lo que quisiera y me comprarían muchos regalos como a mis compañeritos, que el papá lo lleva a donde quiere y le compra muchos juguetes. Entonces con poca paciencia, una contesta, primero papá y yo nos amamos, no vamos a separarnos y menos para que vos tengas más juguetes, no te alcanza con los que te compramos. Es verdad, que los hijos tienen cada salida que no pensamos una respuesta más tranquila y menos agresiva, pero es que en el momento contar hasta diez no me sirve para calmarme y si tenemos en cuanta la respuesta del padre.... pero mijo porque decís esas cosas, no colabora mucho que digamos.
Otra vez me dijo llorando, ¿por qué yo no estuve en la fiesta de su casamiento?, pero si cuando nos casamos vos no existía ni siquiera en proyecto, como vas a ir a la fiesta... yo quería estar en esa fiesta, seguía el testarudo.
Pero hoy estuvo un poco más duro con la pregunta ¿mamá por qué tomas y fumas tanto te hace mal? ¿por qué me decís eso, de donde lo sacaste? , ....no de ningún lado (lo primero que pensé era que en la casa de los abuelos le habían dicho algo porque acababa de llegar de allá), pero me terminó diciendo que era una frase de una película, al ver mi estado totalmente sacada y angustiada. Mira, yo no tomo, donde me viste tomar, solo tomo alcohol en las fiestas y fumo sí pero no me parece que eso sea algo que tengas que controlarme vos.
No sé, los chicos de hoy vienen con una mente muy rápida y nos desarman totalmente con un comentario inocente, donde nosotras quedamos hecha pedacitos, angustiadas, pensando que hacemos mal y ellos a los dos minutos ya están jugando o hablando de otra cosa.
A lo mejor es una materia que tenemos que aprobar en el estudio de ser madres y no me avisaron, esa de responder preguntas inocentes de los hijos sin gritar, enojarnos, o angustiarnos en el camino, por ahora reprobé esa materia y como vienen las preguntas de mis hijos si no estudio voy a llevármela de por vida.
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