Cuando uno discute con alguien siempre se queda pensando...¿ y al final quién ganó ?. Hay distintos tipos de discusiones, podemos discutir de política con los compañeros de trabajo o la familia, podemos discutir de la actualidad con amigos o parientes, pero las peleas más interesantes se dan dentro del núcleo familiar.
Cuando me encuentro frente a mi hijo de siete años argumentando tranquilamente porqué tiene que hacer algo y él contestandome a cada argumento con su punto de vista, primero pienso que tengo un diputado en potencia en casa, después, cuando ya me quedo sin argumentos recurro a la famosa frase " lo hacés porque lo digo yo y se terminó", en éste punto no se si gané yo porque me quedé con la última palabra o mi hijo porque logró sacarme de las casillas y dejarme sin argumentos.
Otra pelea interesante es con la pareja, empezar hablando del tiempo, del auto que se rompió de nuevo mientras tomas unos mates y terminas gritando como en la cancha, porque un tema lleva a otro y él te dice tenés razón, esa frase lejos de reconocer una derrota, esconde otro significado, indica que con la calma del mundo puede decirme a la cara ...no voy a hablar más con vos en este estado de nerviosismo, lo que provoca un efecto contrario porque lejos de apacigüar las aguas las alborota al punto de ebullición y entonces siempre terminas gritando más y mandándolo con su mamá que lo espera con los brazos abiertos, muy a pesar tuyo.
En este caso, tampoco puedo dilucidar quién gana porque siempre me dijeron que el grita en una discusión ya perdió, en este caso yo, porque él parece gandhi haciendo yoga con la paz del mundo a sus espaldas, pero me niego a pensar que por gritar ya perdí, porque dónde queda entonces el hecho de que yo tengo razón, en verdad la tengo , entonces gané yo. A este punto estoy totalmente confundida y me reconozco absolutamente desinformada en este aspecto, necesitaría un sociólogo o un mediador para determinar este punto.
¿Quién puede decirme como sé si gané una discusión?, ¿ tiene algo que ver mantener la calma y no gritar?, consideren que tengo sangre italiana y gallega corriendo por mis venas lo que hace muy difícil bajar el tono de voz.
yo gano siempre las discuciones... asi que no me discutas!!! jejeje
ResponderEliminarPobre santo tu marido!!! Lo compadezco!!
ResponderEliminarYo creo personalmente que el que grita en las disuciones no es precisamente el que gana, pero estoy segura que por lo menos se descarga, en cambio el que permanece "tranquilo" y sin desbordes, lamentablemente, se las traga, con las concecuenias que ello trae, los nervios en el estómago, yo grito, rompo, pego unas piñas a la mesa o a la pared y quedo una seda...jajaja
ResponderEliminarBESOS, ANA