Hola amigos, ayer fue uno de esos días negros, donde todo te sale mal, miras a tu alrededor por si te esta rondando un gato negro, miras el calendario para ver si es marte trece, hasta que te das cuenta que no , que solo es un mal día.
Desde la mañana, tuve que levantarme temprano para hacerme análisis, no que eso me moleste, pero madrugar para mi es una tortura, después de preparar mis hijos para la escuela y jardín, tuve que hacer trámites. En el primer lugar me dijeron, que no podían recibirme los papeles, de vuelta en casa, llamé por teléfono y fui a otro lugar donde aparentemente me recibirían los papeles, al llegar estaban mal y tuve que volver a casa, para imprimir otros documentos, pero como siempre ramona estaba lenta y encima no me andaba la impresora, le pedí a una amiga que me los imprima, después de varios minutos con varios adultos y una adolescente tratando de imprimir, no logramos hacerlo, el auto me fallaba, y cuando terminé el lugar había cerrado.
Intento calmarme y tomar unos mates, al prepararlo se me cae en la pileta, el agua se me hierve, la estatua que estaba pintando perdió la nariz en el viaje. Intenté imprimir por tercera vez, y las hojas me salían dobladas o no las tomaba la impresora.
En ese momento, me dije, mejor me siento porque como estoy, soy capaz de quemar la casa sin darme cuenta. Perdí en encendedor, la lapicera se me fue por un agujero del bolsillo de la campera, hacía un frío terrible y yo sentada, no quería enchufar nada, ni prender nada, así me quedé, un rato, luego decidí dormir y cuando me levante dije, voy a hacerlo con el pie derecho haber si me cambia la suerte.
Todavía no sé, recién me levanto espero que sí, porque anoche no podía dormir de las pesadillas que me perseguían, donde todo me salía mal, como en la realidad, pero en los sueños siempre es peor, solo me despertaron los besos del perro de mi hermana, que al no estar acostumbrada me dieron un susto de madre, en la oscuridad una sombra se acerca despacio y te lame la cara, hasta que reaccione que era el perro, me quedé helada.
Bueno, los días pasan, los malos momentos se van, por las dudas todavía no intenté entregar los papeles, no sea cosa que no me los reciban de vuelta, esperaré un día donde la suerte esté de mi lado, cuando será lo ignoro, por ahora se hirvió el agua y tome un té, eso es tomar lo malo y transformarlo en algo bueno sin ser pesimista, vamos Sara todavía.
Hay días que es mejor no levantarse de cama Sara, pero esos los tenemos todos. Mucho ánimo guapa!!
ResponderEliminarTENES RAZÓN MARTA GRACIAS POR SEGUIR MI BLOG, COM YO SIGO EL TUYO BESOS GUAPA
ResponderEliminar